Llegué de rebote a la que ha resultado ser una gran carrera.A principio de semana la idea fue apuntarme a la Selenika, 106km en los que podría demostrar los avances logrados este año gracias al entreno, kilometros de pistas en las que desarrollar una velocidad de crucero alta para intentar quedar entre los 50 primeros.
El lunes suena la alarma, Portilla me comenta que ha intentado hacer la inscripción y las plazas están agotadas... 1300bikers!
Decido entonces encontrar una alternativa para desahogar mi necesidad de competición, encuentro la 1ª Vilalbike.
30km de sendero sin mucho desnivel para intentar lucirme. Cual sería mi cara cuando en la salida empiezo a ver maillots conocidos, oler a crema de calentamiento y a empequeñecer ante la competencia. Aún así salgo en primera línea. La salida no da para titubeos, salimos al sprint, pronto llegan los primeros senderos estrechos que hacen que se empiecen a abrir diferencias, no estoy mal situado, pero tampoco se puede decir que esté en el primer grupo.
Poco a poco encuentro mi ritmo y empiezo a recuperar posiciones, como siempre fuerte ritmo en las subidas penalizando levemente en las bajadas, handicap cada vez menos condicionante.
Es en una de estas bajadas donde yo y 5 más, perdemos un tiempo precioso al perdernos durante quizás 4'.
Finalmente entro en la posición 26, de nuevo pensando que lo podría haber hecho mejor...
La Trinxa está a dos semanas y espero poder mejorar y conseguir el mejor resultado de la temporada.
Mención aparte merecen los organizadores de la Vilalbike, magnífico circuito, barata... mejor dicho, muy barata, lo que la convierte en una carrera a tener en cuenta para años venideros.
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